martes, 13 de mayo de 2008

Sentado a esperar

Atardece, las sombras se agigantan al igual que las penumbras, los sonidos se pierden y las calles pronto se quedan vacias, la acera guarda sus espacios para un dia mas, cada niño, con un poco de sueño, regresa a sus casas para descansar, para la mañana siguiente poder seguir disfrutando del sol, de los juegos y de las risas.

Las calles quedaron vacias a excepcion de algun auto que pasaba perdido, buscando la direccion correcta a casa, las parejas que disfrutaban de su conversacion tambien regresaban a sus hogares, los jovenes, los niños y los matrimonios, todos ellos avandonaron las calles, pues ya nada habia que esperar ahi.

Entre el susurro del viento entro otro sonido, un rechinar, lento y cansado...quien podria ser??? ya todos estaban en su hogar. Un hombre, sentado frente al portico, solo las luces de su casa lograban iluminar un poco su rostro, se veia fatigado, deprimido pero paciente, cada cierto momento soltaba un suspiro al mismo tiempo que se mecia una vez mas, un anciano con los años sobre el rostro, de mirada perdida y con unos ojos que esperaban...que seria???

Espera en la noche sombria, cuando el atardecer habia acabado. El anciano, meciendose al compas de su respiar, añorando los instantes que nunca obtuvo con los años, los imagenes que le fueron imposible apreciar, la compañia y el amor que nadie pudo darle, aun lo espera, sus ojos estan cacsados y las manos que alguna vez escribieron solo sirven para tenerlas sobre el regaso, la piel se añejo y las iluciones con ella, los suspiros se convirtieron en la excusa para seguir respirando.

La silueta que se mece, sueña y espera, los dias que siguen pasando, los fragmentos de la vida que se van perdiendo, los respiros desperdiciados en los instantes sobre la mecedora, la figura que espera por la compañia, que añora una caricia y un beso, que vive por los nietos que ningun hijo pudo darles, la esposa que hubiera hecho los dias mas felices y la mujer que llenaria sus antiguos escritos.

El anciano que espera en la obscuridad, solo, pidiendo la ultima caricia antes de partir, soñando con la mujer de sus escritos y añorando un "te quiero"....

Quien diria que con el paso del tiempo...me convertiria en el???

Miguel...

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